El acabado de metal trata el exterior de un producto de metal mediante la aplicación de una fina capa complementaria a su superficie. Cada proceso de acabado de metal se usa para un propósito diferente. Desde la galvanoplastia hasta el cromo decorativo, el acabado de metal puede ser útil para una serie de industrias y aplicaciones.
Independientemente de las aplicaciones, las ventajas de los tratamientos de acabado de metales incluyen:
◆ Mayor resistencia a la corrosión
◆ Mayor grosor de superficie
◆ Mayor resistencia y durabilidad
◆ Mayor conductividad eléctrica
◆ Mayor resistencia al desgaste, deslustre, químicos y eléctricos
◆ Atractivo decorativo mejorado
◆ Mayor soldabilidad
◆ Mayor dureza superficial
◆ Aumento del potencial de vulcanización (el proceso de conversión de caucho o polímero a materiales más duraderos)
◆ Mejora de la adhesión
◆ Mayor tolerancia de torque
¿Cuáles son las opciones de acabado de metal más populares?
Los principales métodos de acabado de metales, todos los ofrecidos en Bend Plating incluyen:
◆ Revestimientos físicos de deposición de vapor (PVD)
◆ galvanoplastia
◆ Pulido de metal manual y robótico
◆ Rectificado y Contorneado de Soldaduras
◆ Reparación de soldadura
◆ Texturing
◆ Cobre decorativo
◆ Nickel
◆ Chrome
◆ Recubrimiento de oro de 24 quilates y Deposición de vapor de temperatura baja (LTAVD)
¿Cómo elegir un proceso de acabado de metal?
Algunas preguntas para tener en cuenta:
¿Cuándo necesitaré completar mi proyecto? ¿Qué tan rápido se aplica la técnica para finalizar el producto?
◆ Es importante recordar que algunas opciones de acabado de metal requieren más tiempo que otras, lo que significa que factorizar la velocidad de producción en sus opciones es crucial.
¿Cuánto dinero estoy dispuesto a gastar en mi proyecto?
◆ Algunas máquinas de acabado son más caras que otras, pero lo compensan entregando resultados más rápidos.
¿Qué tan difícil es el metal que necesito terminar?
◆ Los metales duros usados para máquinas herramientas (carburos metálicos hechos de tantalio finamente dividido, titanio, tungsteno o vanadio mezclado con carbón y cobalto fundido o níquel) a menudo requieren técnicas de acabado más intensas o abrasivos más duros que los usados para metales blandos (plomo, oro , plata, estaño, zinc, aluminio, torio, cobre, latón o bronce).